28.12.10

Balances

La última nota de este año 2010 donde traté de no abusar del espacio del Blog, por la sencilla razón de no tener tanto tiempo y, además, por no encontrar temas que fueran distintivos y que interesaran a los lectores.
Mis otras actividades (donde, también, me la paso escribiendo notas) absorbieron el tiempo y está bien. Estos Blogs deben servir para decir algo que lo valga.
Siempre a esta altura del año, la gente hace balances de su vida; al menos, la gente que siente la vida como un don, como un regalo y que tiene la intención (no pretenciosa) de teñirla de trascendencia. He dicho hasta el hartazgo que una vida vivida sin sensibilidad, sin solidaridad, sin amistad y sin amor, no es una vida; en definitiva, no es otra cosa que un remedo, una parodia de la existencia.
Y sin embargo, sabemos cuántos seres humanos viven (o sobreviven) de este modo. Sin apetencias de ninguna clase, sin futuro de ninguna clase. Hay algo que es fundamental en la existencia humana: el sustento. Los hombres necesitan alimentarse sin zozobras y tratar de educarse en la medida de lo posible. Cuando se consiguen estas cosas, hay más de medio camino andado.
Pero, claro. estas sociedades donde nosotros vivimos, fabrican excluídos. No fabrican personas. Hay una indiferencia supina hacia los desclasados, hacia los que están fuera del sistema y es casi imposible incluyan alguna vez.
Por eso, se observa, con asombro, ese trabajo de Lula en el Brasil que, dicen, incluyó a 27 millones de personas en el sistema. De la indigencia a la clase media.
A mí me resulta (ahora que lo observo a través del tiempo vivido) patético ver cómo ciertos personajes despotrican contra la clase media. Pero ¿qué persona no quiere pertenecer a la clase media? Es allí donde la sociedad se vuelve más justa y equitativa. En los países europeos, un altísimo porcentaje de personas pertenecen a la clase media, es decir pertenecen a los que viven en viviendas razonables, comen todos los días, visten más o menos decentemente, se instruyen, también, razonablemente. !Qué importa, después, si alguien tiene un millón más o menos que el otro!
Esta es la clave que debería desvelar a todos los gobernantes. Hacer que su pueblo fuera clase media. Y algunos trasnochados hablan mal de la clase media y ellos salieron de allí y siguen siendo clase media. Todos los ideólogos y pensadores de la Izquierda (con alguna excepción, desde luego) salieron del seno de hogares burgueses. ¿Y qué tiene de malo esto? El asunto es cómo se piensa, no de dónde uno viene. Que les pregunten a las madres de cinco hijos que viven en las villas si no les gustaría mandar a sus pibes a la escuela, tener una vivienda que los abrigara en el invierno, un baño con higiene y comida todos los días. !Pregunten! !Y vean cuál es la respuesta!
En los balances de fin de año, pido, ruego, suplico: !BASTA DE MENTIRAS Y SANATAS! !BASTA DE HABLAR DE LOS POBRES Y CADA VEZ HAY MAS POBRES! !BASTA DE OPORTUNISTAS Y DEL CLIENTELISMO POLITICO, DE LOS QUE HACEN UN NEGOCIO DE LA POBREZA!
Ojalá en el 2011, consiguiéramos sacar a una parte de nuestros compatriotas de la miseria en la que, hoy, viven. OJALA.
FELIZ AÑO PROXIMO

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007 fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña. En el 2010, fue distinguido con el Premio "SANTA CLARA DE ASIS" a su trayectoria periodística y el Premio "SUR" a su trayectoria literaria.

20.12.10

Baudelaire (con yapa)

Volví a hablar sobre Charles Pierre Baudelaire en el programa de radio Splendid, en el ciclo sobre escritores que el bueno de Eduardo Marino me permite los sábados a las 21.
Radio Splendid está en la AM 990 del dial y el programa de Eduardo Marino se llama "Rincón Porteño".
Luego de terminar de hablar sobre Baudelaire, Marino me dijo que junto a León Felipe habían sido los dos poetas que más le habían impresionado, de la cantidad de poetas y narradores de los que hablé en el año.
Y claro. Los pequeños poemas en prosa de Baudelaire, son insuperables. En esos textos breves, está todo el talento de este poeta fenomenal, que revolucionó la poesía del siglo XIX y tuvo gran influencia en los poetas que llegaron después, como Apollinaire, Verlaine, Mallarmé y Rimbaud.
Leí algunos textos de esos poemas en prosa que son tan bellos y tan elocuentes. Podrían haberse escrito ayer, sobre todo lo que le dice al perro: "!miserable can, te pareces al público! cuando el perro, en vez de oler un frasco de perfume, prefiere ir a oler un paquete de excrementos.
O cuando en "El Pastel", luego de describir el regocijo que le producía el paisaje, ve a dos chiquillos que se pelean por un pedazo de pan, al que llamaban "pastel". El pan se desmigaja por el suelo y a Baudelaire el paisaje ya no le parece hermoso; por el contrario, lo ve brumoso, gris en un territorio donde al pan le llaman "pastel". Imperdible.
O cuando reclama, en otro texto, que es hora de embriagarse: dice Baudelaire: "no importa de qué. Puede ser de vino, de poesía o de virtud."
Estos textos geniales fueron los que desmenucé en el programa y todos coincidieron que era literatura de la mejor, esa que no muere nunca y que debe leerse eternamente.
!Honor, entonces, a Baudelaire! que murió atacado de esa sífilis que arrastraba desde la juventud. Gran frecuentador de burdeles, se la había contagiado una prostituta y, a su vez, él la contagió a su amante Jean Duval, aquella mulata de la Martinica, que fue su gran amor.
Cuentan sus biógrafos que, en 1870, tres años después de la muerte del poeta, se vio a la mulata por las calles de París, pidiendo limosna y caminando con muletas.
!Qué vida la de este gran poeta francés! el autor de "Las flores del mal" y el traductor del inglés de la obra de Edgar Allan Poe, escritor al que admiraba.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue designado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña. En el 2010, fue distinguido con el Premio "SANTA CLARA DE ASIS" y el "PREMIO SUR".

11.12.10

Independiente de América

Sufrí como sufrieron todos los hinchas y simpatizantes de Independiente. Porque, debemos reconocer que la parada fue difícil. Había que remontar una diferencia de dos goles ante un rival que empató el partido y jugaba con mucha tenacidad.
Felizmente, con la suerte propia de todo campeón, Independiente pudo celebrar (y nosotros también) la Copa internacional número 16 de su historial deportivo.
Pero lo que me interesa resaltar, en esta nota, es el renacimiento de un orgullo que parecía extinguido por tantos años de frustraciones y tantos pasos en falso. Haber construido el nuevo estadio (más allá que falta terminarlo) da una cuota plus porque, precisamente, en ese estadio, este club concretó sus noches más gloriosas, sus veladas inolvidables.
Y me puse a recordar cuando le hicimos cinco goles al Santos de Pelé con motivo de un partido por la inauguración de las luminarias. Nunca presencié algo tan hermoso, tan bien jugado por los dos equipos. Con un Bernao intratable y un Pelé finísimo, como siempre.
Y recordé cuando a Sarti se le escapó la pelota en aquella final con el Inter. Estaba allí, detrás de ese arco que da a la visera y la avalancha en la tribuna me hizo terminar en el veredón.
Recordé a mi padre, fallecido hace muchos años, cuando íbamos juntos a la cancha a ver aquella endiablada delantera de Micheli, Cecconato, Lacasia, Grillo y Cruz. Una fiesta para los ojos. Y a BOCHINI, el gran BOCHINI. Y la noche frente al Cruzeiro donde, como el otro día, había que hacer tres goles para clasificarse. Y se hicieron.
Vi goleadas memorables como aquella que nos consagró Campeón ante un San Lorenzo incentivado, que se acercó a Avellaneda para escupirnos el asado. Y la vaca gigantesca, roja, pintada por mi entrañable amigo Pedro Gaeta, luciendo en la tribuna.
Son demasiadas anécdotas, demasiadas tardes y noches de alegría que nos ha dado el "Rojo". Quitarle méritos, hablar de "amargos", a una institución que ganó tanto, es propio de mediocres, de tipos que arrastran un complejo de inferioridad muy serio. Habría que tratarlo terapéuticamente. Y con urgencia.
Otra noche memorable fueron los nueve goles a Chacarita, los cuatro a Boca, los cuatro a Racing; los seis goles a Colón en el "Cementerio de los Elefantes". La increíble noche de la hazaña en Córdoba jugando con ocho y saliendo Campeón.
La goleada a Peñarol en Santiago de Chile para quedarnos con la Copa "Libertadores". En fin: infinitas batallas deportivas que ha dado el "Rojo" con esa mística que, reconozcamos, habíamos perdido en los últimos años.
Por eso: el 2011 debería depararnos más éxitos en la disputa de las cuatro Copas para las que estamos nominados. E ir por más. Y terminar el estadio. Y ordenar las cuentas. ¿Pido demasiado? Y sí, pero esta institución, no sé cómo hace, pero siempre saca la cabeza del pozo, a pesar de los errores de su dirigencia.
INDEPENDIENTE DE AMERICA. !GRACIAS POR ESTA ALEGRIA!

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007 fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña. En el 2010 fue distinguido con el Premio "SANTA CLARA DE ASIS" y el "PREMIO SUR")

25.11.10

!Dale con los 70!

Todos coinciden que los ´70 fue una época tenebrosa. Que se utilizaron métodos aberrantes para destruir a parte de la juventud argentina. Tuve amigos desaparecidos. Tuve el lógico temor de muchos jóvenes. Cuando se desata la violencia, es muy difícil frenarla y todo termina en un baño de sangre. Así pasó con la guerra civil española, así pasa aún en las guerras tribales de Africa.
Sin embargo, esta lección no ha sido aprendida totalmente por algunos. Seguramente "imberbes" como lo definió el Gral. Perón; entonces, creen que, escudándose en un anonimato artero, sin dar la cara ni el nombre y apellido, pueden descalificar a cualquiera.
A mí no me importa que respondan las notas de mi Blog cuando no tienen identidad. Se ocultan bajo el "anonimato" y así es fácil, muchachos, así cualquiera es Gardel con todos los guitarristas.
Las ideas deben debatirse civilizadamente, no en la jungla que da el rencor, la mediocridad y la tontería. A esos arteros insultos, ofreceré, siempre, mi mejilla y una vida en la que, nunca, hice mal a nadie, nunca he currado ni robado ni mentido para medrar. Ese es mi blasón, nada más.
Por eso, descalificar cuando uno se siente dolido por la muerte de un pibe al que no conocía, a pesar de ser de mi ciudad, es infame, es propio de descerebrados.
Lamentablemente, vivimos tiempos difíciles, de intolerancia, de "barrabravas" escudados en las sombras. Créanme: no le hacen nada bien ni al país ni a nadie.
Tampoco sé si son partidarios del gobierno o de la oposición los que tan arteramente descalificaron mi angustia por la muerte de Mariano Ferreira. No lo sé ni me importa.
Pero noté la misma perversidad, el mismo cinismo que tenían los "grupos de tarea" cuando masacraban a algún pibe delante de su madre o de su hermana.
El mismo hijoputismo. Son los mismos que, alegremente, hubiesen ido a arrojar piedras contra las vidrieras de los negocios judíos en la Alemania nazi. Los mismos. Los de siempre.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En 2007, fue reconocido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la legislatura porteña. En 2020, fue distinguido con el Premio "SANTA CLARA DE ASIS" a su trayectoria periodística y el Premio "SUR" a su trayectoria literaria.)

24.11.10

El rancho cascoteado

En nuestro club rotario, el promedio de edad de los miembros llega a los 68 años. Una barbaridad. Un club de gerontes. Hay varios inconvenientes: la falta de compromiso de una juventud que no se sabe en qué está y que, por lo tanto, no quiere participar en ninguna institución, el ritmo alocado de vida superflua que "no deja tiempo" para otros menesteres y la falta de solidaridad que hace que instituciones como los Rotary, verdaderas entidades de servicio, no puedan desplegar un mayor número de adherentes.
Pero es cierto que la cronología avanza, inexorablemente; y nos empiezan a cascotear el rancho. Esta semana, sin ir más lejos, perdí dos personas de mi amistad, vecinos invalorables de la ciudad de Avellaneda. Los dos, tanto Jorge Sventicic como Haydée Muñiz, se comprometieron con sus vecinos, organizaron eventos, fueron solidarios y personas de alta calidad humana y ética. Lamentablemente, las perdimos. Y debemos llorarlas, sí señor, porque no serán sustituidas fácilmente.
El país está adoleciendo de esta calidad de gente. Sólo tenemos aquellos que se meten en la política para satisfacer muchas de sus apetencias personales. Muchas veces, apetencias que no son espirituales sino materiales.
La Democracia da para todo; hay un montón de mediocres encaramados en los partidos políticos y, lo peor, con apetencias de ser !PRESIDENTES DE LA REPUBLICA!
!Pobre Nación!
Mientras tanto, en las entidades intermedias, hay carencia de dirigentes, de verdaderos protagonistas sociales. Personas que le dediquen su tiempo y su capacidad a trabajar por el bien de la comunidad. Esto es lo que está haciendo falta.
Por eso, cuando se muere gente valiosa, tenemos todo el derecho de llorarlos.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue distinguido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES, por la Legislatura porteña. En el 2010, ha obtenido el Premio "SANTA CLARA DE ASIS" por su trayectoria periodística y el Premio "SUR" por su trayectoria literaria.)

13.11.10

Baudelaire

Esta noche, hablaré en el programa de radio Splendid (AM 990) sobre este poeta extraordinario que fue el francés Charles Pierre Baudelaire (1821-1867).
Baudelaire había nacido en París y su padre murió cuando él tenía seis años. Le dejó una herencia que el poeta fue dilapidando por su vida desordenada y sus costumbres licenciosas.
Su madre se casó con un militar y Baudelaire nunca le perdonó esto. Odiaba a su padrastro que, además, era un tipo rígido y quería encausar al muchacho. !Imposible!
Baudelaire estudió, pero nunca fue disciplinado. Tuvieron que expulsarlo de alguna escuela y hasta se formó un consejo de familia para ver qué hacían con su vida. Mientras tanto, el poeta seguía de putas; una de ellas, una judía calva a la que tenía como amante, le enchufó la sífilis, enfermedad que arrastraría durante gran parte de su vida y que lo llevaría a la muerte.
Se cree que la sífilis lo dejó semi-impotente; hay una anécdota que pinta de cuerpo entero a este complejo personaje y es la que cuenta Camille Mauclair, uno de sus biógrafos más notables. Dicen que Baudelaire andaba tras una beldad que regenteaba un salón literario (y que, seguramente, era la hembra de algún ricachón de la época) pero no se atrevía a decirle nada; entonces, le enviaba poemas anónimos y cartas de amor sin firma donde le confesaba su pasión. La mujer sintió curiosidad por este enamorado secreto y, atando cabos, llegó a la conclusión de que era Baudelaire el que escribía esos textos. Entonces, se lo llevó a la cama, pero Baudelaire no funcionó.
Mauclair transcribe la carta que el poeta le escribió a esta Madame; es una obra maestra de ocultamiento de su problema mientras le echa la culpa, sutilmente, a la mujer.
Esto demuestra que Baudelaire funcionaba mejor con la pluma que con otro elemento.
Escribió un libro considerado la bisagra de la poesía moderna: "Las flores del mal" y fue considerado, por los críticos, como uno de los poetas "malditos", una especie de "Dante moderno". Ese libro marcó un antes y un después en la Poesía; pero ese mismo año, publicó "Pequeños poemas en prosa", un texto que me parece singular, bello, expresivo, caústico, sincero, magnífico. Quiero mucho este trabajo de Baudelaire.
"Los paraísos artificiales" (con influencia del inglés De Quincey) y sus libros de crítica de arte más sus traducciones al francés de su admirado Edgar Allan Poe, son parte de su obra inmortal.
Una negra de la Martinica, prostituta para más datos, que se llamaba Jean Duval, fue su gran amor, la única que satisfacía al poeta y por la cual se desvivió. Dicen que la vieron a esta negra, durante la guerra franco-prusiana de 1870, en muletas y mendigando por las calles de París. Según parece, Baudelaire le había contagiado su sífilis.
!Honor a este gran creador, a este poeta formidable de las letras francesas! Quise rendirle este pequeño homenaje desde mi Blog.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007, fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la legislatura porteña. En el año 2010, se hizo acreedor al Premio "SANTA CLARA DE ASIS" a su trayectoria periodística y al Premio "SUR" por su trayectoria literaria)

21.10.10

Mariano Ferreira

Me había obligado a no escribir más sobre la realidad; a fin de cuentas, mi tarea mayor es escribir Literatura, enseñar las técnicas literarias, hablar sobre curiosidades de escritores. En fin, dedicarme a lo mío.
Pero me produjo tanta indignación el asesinato de este muchacho, militante del Partido Obrero, que no pude con mi genio. Y aquí estoy.
Antes que nada, quiero aclarar que no soy militante de nada; soy demasiado jovato para andar en marchas y reclamos. Cuando era joven, sí. Y en 1977, me fui a España para vencer la "persecuta".
Pero hace tiempo que vengo observando un clima de violencia muy grande en la sociedad argentina. Y lo más insólito es que estamos en Democracia, que hay libertad de expresión y que el gobierno no reprime a nadie.
Lo único que digo y lo sostengo (hace rato que lo digo) que las autoridades no pueden tensar la cuerda del desencuentro, de la descalificación permanente, de la chicana dialéctica. Por una sencilla razón: en la gente de nivel cultural, las polémicas, las diatribas verbales, terminan ahí. En la gente inculta, que no tiene dos dedos de frente, esa violencia se vuelve física.
Fíjense: el martes, en el encuentro de fútbol de Independiente contra ese noble equipo uruguayo, el Defensor Sporting, una bestia arrojó una piedra al arquero de Defensor y le partió la cabeza. El partido mereció (aunque no se hizo) suspenderse, con el consabido problema para la institución de mis amores. Y la pérdida monetaria que significa suspender un encuentro.
El árbitro, curiosamente, prefirió seguir jugándolo y el arquero, dignamente, se prestó a jugar el partido.
Un día después, matan a Mariano Ferreira, un militante político. Las patotas están a la orden del día y eso es lo que no se entiende dentro de una Democracia. Pero no olvidemos que hubo un tipo que juntó a los "barrabravas" para llevarlos !al Mundial de Sudáfrica!. Un verdadero bochorno porque muchos de esos impresentables fueron deportados.
A Mariano lo matan los asesinos de siempre, llámense "Triple A", "Grupo de Tareas", "culatas sindicales", "barrabravas", "mano de obra" siempre ocupada.
Y el país tiene que llorar la muerte de este joven, de apenas 23 años, cuyo único pecado era reclamar por algo que consideraba justo.
Alberdi dijo allá lejos y hace tiempo: "!Bárbaros! Las ideas no se matan" y Voltaire dijo: "no comparto tu idea, pero doy la vida para que la expreses".
Yo, que me siento un verdadero demócrata, que no pertenezco al Partido Obrero ni a ningún otro partido político, que amo la paz y la belleza, que amo a la buena gente y al abrazo solidario, quise rendirle este humilde homenaje a Mariano.
Ojalá su asesino sea descubierto. Ojalá se pudra en una cárcel. Ojalá el país y su gobierno encuentren la forma de gobernar sin tanta rispidez, sin tanta crispación.
Cristina y Néstor criticaron duramente este asesinato. Así se hace.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En 2007, fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES, por la legislatura porteña. En 2010, se hizo acreedro al PREMIO "SANTA CLARA DE ASIS" y el "PREMIO SUR".)

9.10.10

!Otra distinción!

He sido distinguido con otro Premio y me está dando un poco de miedo. ¿Estaré con un pie en la tumba para que, en un país donde, siempre, te ningunean, a uno lo premien seguido? "That´s the question".
En este caso, se trató del Premio "SUR", una bella estatuilla creada por el artista Carlos Pintos y que, en ésta, su primera vez, fue a parar a manos de dos "pesos pesados" de la cultura como lo son Vitillo Abalos (uno de los sobrevivientes del mítico conjunto folklórico los Hermanos Abalos) y el artista plástico Salvador Sauco. Yo fui el tercero en discordia, por mi trayectoria literaria.
Mi estatuilla lleva la efigie de Benito Lynch.
En realidad, el esfuerzo y la generosidad de Carlos Pintos, de premiar a sus pares, tuvo, como siempre, ausencias significativas. Por ejemplo: ningún directivo de las instituciones nativistas de la ciudad como "Martín Fierro" y "Leales y Pampeanos" se acercó a saludar a una figura emblemática como Vitillo Abalos. Pero es que estos tipos están para comer el locro de los 25 de mayo.
La creación del Premio "SUR" se lo debemos a este artista incomparable que es CARLOS PINTOS: músico, dibujante de excepción, pintor, escritor, fundador de revistas, factotum en el Premio "Linares Cardozo" que se entrega en Entre Ríos y una gran persona, cuyos atributos quedan demostrados: crear un Premio que distinga a colegas suyos.
Está magnífico que a uno lo premien en vida; porque eso de oír discursos de ocasión, cuando uno ya está vestido de finado, es patético, horrible.
Seguramente, a muchos de mis colegas se le derramó la bilis. Ustedes saben que la envidia y los celos, nunca se le niegan a nadie. Yo me río mucho con estas miserias. Y recuerdo a un grande como el poeta Raúl González Tuñón, capaz de cruzarse todo un salón para saludar a alguien. Ahora, se hacen los distraídos esperando que el que vaya a saludar sea el otro.
!Qué pelotudos! ¿No es cierto?

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007 fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña. En el 2010, ha sido distinguido con el Premio "SANTA CLARA DE ASIS" y el Premio "SUR")

12.9.10

Almafuerte

En el programa radial "Rincón Porteño" que transmite Radio Splendid todos los sábados (AM 990) y que conduce Eduardo Marino, hablé el sábado pasado sobre Pedro B. Palacios, más conocido por el apodo de "Almafuerte".
Decía yo (tal vez, arriesgando una opinión) que León Felipe, el gran poeta español, tenía resabios de "Almafuerte" o más bien yo le encontraba a León Felipe ciertas constantes en su poesía que se asemejaban a la de Almafuerte.
Me refería a su intransigencia, a sus conceptos rotundos, a su individualismo pertinaz, a esa especie de mesianismo que, en Almafuerte, está tan acentuado a lo largo de su obra.
Aproveché para ilustrar mi intervención con un CD de Alberto Cortés donde éste le canta a Almafuerte, a través de un trabajo que contó con su musicalización a varios de los poemas del vate bonaerense.
Pedro Bonifacio Palacios había nacido en el pueblo de San Justo, provincia de Buenos Aires, fue autodidacta, de familia muy humilde y se crió prácticamente solo porque, a la muerte de su madre, su padre le abandonó, siendo una criatura.
Criado por unos parientes, a los 16 años ya era director de una escuela, a pesar de que no tenía título habilitante y, por este motivo, le echaban de las escuelas donde enseñó.
Pero, a pesar de esto, Almafuerte dictó clase en escuelas de Mercedes, Saladillo, Chacabuco, Trenque Lauquen, y luego ejerció el periodismo en la ciudad de La Plata, trabajando para "El Pueblo", un diario que se editaba en la capital de la provincia.
Una vez, le dijo al secretario de Bartolomé Mitre: " dígale al General que el poeta Almafuerte, no le hace antesala a ningún milico" y esta frase quedó en la historia, en su biografía, para ilustrar su fuerte personalidad y su individualismo.
Era orgulloso, contradictorio, amaba a los chicos y la enseñanza era para él su norte y su guía. Recién, en las postrimerías de su vida, recibió una pensión vitalicia del Estado, pero la disfrutó pocos años porque, en 1917, se apagaba su existencia, a los 62 años.
Su contestataria filosofía que lo acerca a Nietsche, le hará decir: "Si te postran diez veces, te levantas; otras diez, otras cien, otras quinientas..." en los insoslayables "sonetos medicinales" y yo creo que Almafuerte, tan vapuleado por los poetas del ´60 (que poníamos en tela de juicio su mesianismo) es un poeta distinto a todos, con una voz absolutamente diferente, que nos puede gustar más o menos, pero que se distancia, sin duda alguna, de todos los poetas argentinos.
Hablé, entonces, de él, en el programa y, creo, fue un lindo homenaje a este hombre que provenía de los estratos sociales más humildes y hoy una calle de La Plata lleva su nombre y una calle de Buenos Aires, también.
No son muchos los poetas que adornan las calles con sus nombres. Para mi gusto, son demasiado pocos.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES y en 2010 obtuvo el PREMIO "SANTA CLARA DE ASIS" otorgado por la Liga de Madres de Familia, Diócesis Avellaneda-Lanús).

2.9.10

Premio "Santa Clara de Asís"

Fue muy buena la ceremonia donde me entregaron (junto a otras personas de los medios de comunicación)el Premio "Santa Clara de Asís".
El domingo 22 de agosto, por la tarde, concurrí, con toda mi familia, al Marriott Plaza Hotel, donde, en un salón bellísimo, se llevó a cabo el acto de premiación.
Fueron 37 estatuillas que se entregaron, a lo largo y ancho del país. Me emocionó ver a periodistas de Formosa, Jujuy, Catamarca, vestidos muy pobremente (como cuadra a una profesión que no da dinero, salvo para los sinvergüenzas y acomodados de turno)recibiendo el Premio.
Y me alegré mucho que me acompañaran algunos amigos entrañables como Tito Agosti, Pedro Gaeta, Haydee Breslav, Ana Beatriz Romasco, Ricardo Gandolfi con su familia, María Rosa Lema (mi querida amiga, compañera del recordado Juan Carlos Nigro)y otros colegas.
La señora Nora Colombo, presidenta de la Liga de Madre de Familia de la Diócesis Avellaneda-Lanús, fue la encargada de entregarme la estatuilla. Esta distinción la tomo como algo invalorable, que ambicionaba desde hacía tiempo y que considero (como se lo dije a ese santo varón, brillante y lúcido de Monseñor Rubén Oscar Frassia, Obispo de la Diócesis)merecida. No por pedantería sino por "prepotencia de trabajo" -como decía Roberto Arlt. Nadie ha escrito tanta cantidad de notas periodísticas, tantas columnas de opinión, tantas notas críticas sobre la realidad, a lo largo de tres décadas. Nadie.
Y así me lo hicieron saber en el salón, cuando me entregaron el Premio, mis amigos y colegas, que gritaron como "barrabravas", dando la nota escandalosa de la tarde.
He recibido con mucha alegría mensajes de felicitación del país y el exterior. Me escribieron mis amigos escritores desde España y todos se pusieron gozosos. ¿Será porque, siempre, me he comportado éticamente, que he dado mis opiniones con entera libertad de conciencia, que nunca lucré con mi pluma ni nunca busqué acomodarme como tantos oportunistas que andan por allí? ¿Será que no me vendo ni me venderé? ¿Y que siempre privilegiaré mi libertad y las de los demás, por sobre cualquier otra consideración?
No lo sé, pero hace bien que, de vez en cuando, te mimen en un país donde suele haber tanta ingratitud con la gente honesta.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007 fue nombrado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña. En el 2010, distinguido con el PREMIO "SANTA CLARA DE ASIS" en el rubro "Prensa").

16.8.10

Charlas con Raúl González Tuñón

Recuerdo cuando los sábados por la tarde, nos acercábamos con mi amigo Lubrano Zas (que vivía enfrente) a la casa de Raúl González Tuñón a saludarle y a charlar con él. Raúl era un hombre cordial, de buen trato; me apreciaba mucho y yo retribuía ese afecto, con respeto y admiración.
Era apasionante escuchar a Tuñón hablar sobre sus historias de vida. Había conocido a los más grandes poetas franceses, había sido amigo de César Vallejo, de Neruda, de Federico García Lorca.
"Una vez me fui a Chile por cinco días y me quedé cinco años" -me dijo, sonriente. Y esa trashumancia, ese vagabundeo, esa bohemia, caracterizaron, siempre, su poesía, llena de personajes funambulescos, de tabernas, de muelles, de mujeres "con boina azul".
!Qué poeta maravilloso! Da gusto poder escribir sobre él y recorrer sus libros luminosos. "La calle del agujero en la media" es, para mi gusto, de lo mejor que escribió. Y también sus poemas testimoniales, los que le dedicó a la Guerra Civil Española. Los barrios, los obreros, los bares, los amigos, están siempre presentes en la poesía de este eterno cantor.
"Juancito Caminador", su "alter ego", es una mezcla de humanismo y mundo recorrido.
En aquella casa de la calle Amenábar, en el barrio de Colegiales, me extasiaba escuchando a Raúl contar sus anécdotas. Una vez, recuerdo, me contó cómo había conocido a Carlos Gardel en el famoso barco italiano "Conterrosso". Y a Paul Eluard y los surrealistas, a su amigo Robert Desnos, asesinado por los nazis en un campo de concentración.
Otra vez me dijo, como disculpándose: "yo era un poeta lírico, los otros poemas los escribí por compromiso". Pero no fue así. Era bueno en todo, porque era un poeta en serio y su sensibilidad lo llevó a estar del lado del pueblo.
Querido Raúl, generoso Raúl. Tengo un par de libros con sus dedicatorias sumamente elogiosas hacia mi obra. El cariño le hacía exagerar. Y era un hombre pobre, que todos los meses debía empeñar los cuadros de sus grandes amigos pintores para poder comer.
Una vez me presentó a su hijo Adolfito (en aquella época, un adolescente) y me dijo orgulloso: "Mirá: mi mejor poema".
Querido Raúl: se merecía que escribiera aunque sea estas pobres líneas sobre usted. Fue nuestro patriarca, nuestro padre espiritual para los poetas de la generación del ´60, que lo veneramos. Siempre recibimos su frase cariñosa, su palmada en la espalda, su profundo compañerismo.
Sin duda, estoy hablando de uno de los mejores poetas argentinos. Alguien que "blindó la rosa" y la llevó como estandarte. Quería mejorar el mundo, hacerlo más humano y justo. Y todo lo expresó con belleza, como cuadra a un poeta que se precie.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En 2007, fue distinguido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña)

24.7.10

Enrique Cadícamo

Hoy, en el programa de radio "Rincón Porteño" por AM 990, Radio Splendid, le haremos un homenaje a don Enrique Domingo Cadícamo.
Hablaré sobre él y me acompañará, en los comentarios, Eduardo Marino y también Néstor Rodríguez, que tiene grabaciones muy interesantes con la voz de Cadícamo y otro material de importancia.
Creo que saldrá bien el homenaje. Cadícamo lo merece, porque fue un poeta popular que atravesó todo el siglo XX. Es, por sí solo, toda la historia del Tango y de la Noche de Buenos Aires, ya que él fue un protagonista primordial en esas tenidas en los grandes cabarets y en los fondines de la época.
Fue un hombre que le gustaban las mujeres, el champagne, la buena vida. Empilchaba con una elegancia sin igual, su trato era cordial, con mucho don de gente y aquel mote de "muchacho eterno" que le puso León Benarós es muy adecuado para definirlo.
Escribió más de 1300 tangos, tres libros de poesía, una novela ("Café de Camareras") uno de recuerdos hacia su entrañable amigo y hermano Juan Carlos Cobián y otro texto, donde contó su vida y su jugoso anecdotario.
Su obra es despareja. Bueno sería para alguien que escribió la friolera de más de mil tangos. Da la impresión que Cadícamo no le prestaba atención a algún verso rengo o a una línea endeble, porque, luego, se despacharía con hallazgos como aquel de: "hoy vas a entrar en mi pasado".
Escribió temas hermosísimos como "Ave de paso", "Nostalgias", "Tres amigos", "Anclao en París", "Garúa". No le hizo asco a nada. Escribió en lunfardo, tuvo influencias modernistas, nunca fue chabacano, hizo tangos reos, graciosos como "Al mundo le falta un tornillo" y vivió no sólo en nuestro país sino en el mundo. Nueva York, París, Barcelona, fueron ciudades a las que frecuentó con asiduidad.
Gardel le grabó un sin fin de temas y tuvo el honor de que el último tango que don Carlos grabara en nuestro país, antes de emprender su trágica gira, fue uno de Cadícamo: "Madame Ivonne".
Vivió casi el siglo (99 años), se casó a los 60 y una vez le dijo a Néstor Rodríguez, un eximio comentarista de Jazz, cuando se enteró que éste se había casado a los 23. "¿Cómo pudo hacer eso, jovencito?".
Don Enrique ya tenía más de 90, seguía usando trajes cruzados y corbatas al tono, tenía, todavía, una melena que le caía sobre la frente y sus arrugas la suplía con una mirada candorosa y clara, de "muchacho eterno"...
Sí, estoy seguro que el homenaje a Cadícamo de esta noche en la radio, saldrá muy bien, como se merece este cantor de Buenos Aires.

ROBERTO DIAZ
(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007, fue distinguido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña).

5.7.10

Los poetas lunfardos

La Poesía lunfarda (o lunfardesca) arranca a mediados del siglo XIX, cuando la eclosión inmigratoria, sobre todo de italianos y españoles, combinan una jerga que nosotros denominamos "cocoliche". Allí comenzó este dichoso lunfardo que vino, se sentó a la mesa como un comensal no invitado y se sirvió un montón de platos del idioma.
Todos los países tienen un argot, una jerga que avanza, paralela, con el idioma original. En inglés, se llama "Slang"; en Brasil se llama "Giria", en el gitano "Caló" y así sucesivamente.
En nuestro lunfardo (palabra que proviene de "lombardo" y quiere decir "ladrón") hay mucho de los dialectos italianos y del caló.
Coménzó utilizándose en las cárceles y era un lenguaje de los presos para evitar que los guardia cárceles entendieran. Después, se convirtió en el lenguaje del arrabal y llegó al tango por obra y magia de los letristas que componían aquellos temas.
Fíjense que en nuestro primer tango-canción, que grabó Carlos Gardel en 1917, dice Pascual Contursi en sus dos primeras palabras del texto: "percanta que me amuraste". La palabra "percanta" (que significa mujer) viene de cuando los italianos se le acercaban a las prostitutas para preguntarle cuánto cobraban. "Per cuanto" decían.
!Qué rica es nuestra lengua! Siempre recuerdo, una noche en Barcelona, mientras hacía el aguante a mi amigo, el periodista y escritor peruano Carlos Meneses, que viajaba hacia Palma de Mallorca, donde residía, una larga tenida sobre lunfardo porteño y peruano. !Mi Dios! !Cuántas palabras se dijeron esa noche, misteriosas, extrañas, para él y para mí! El lunfardo peruano, también es rico en léxico.
Para mi gusto, el mejor poeta del lunfardo ha sido Carlos de la Púa. Hay un tono, un clima dramático en sus versos que no encuentro (salvo quizá en Celedonio Flores) en otros poetas lunfardescos, que abusaron del color, del pintorequismo y terminaron haciendo versos superficiales.
Tal vez, aparezca un poeta del lunfardo que me rebata lo que digo y está bien. Es lo que me parece.
Pero no invalido, para nada, esta lengua que tiene un tango emblema llamado "El ciruja" y en tantos otros donde está, siempre, presente en sus versos.
Es la jerga popular del Río de la Plata y se renueva permanentemente. Hay palabras como "trucho" que ha trascendido la jerga para transformarse casi en idioma universal. Hay palabras como "chabón" que las nuevas generaciones popularizaron hasta el hartazgo. Hay un montón que seguimos utilizando, ya sin darnos cuenta de si pertenecen al idioma de Cervantes o al de Carlos de la Púa.
!Qué importa! Lo que importa es que nos entendamos ¿no es cierto, bepi? ¿O querés seguir amasijándote con el diccionario de la Real Academia, cuando, aquí nomás, a la vuelta de la esquina, un orre te bate: "¿qué me contursi con esta cheno, llena de minas que están, realmente, papirusas, como para llevarlas a la catrera?"
Y uno no sabe qué decir, sobre todo cuando acaba de dejar un libro de Unamuno donde expresa que de 20 modismos americanos, 18 son españoles.
!Dejá de joder, don Miguel! !Escuchá cómo hablan los atorrantes de los fecas! Siempre recuerdo cuando mi amigo Blas Raúl Gallo le dijo al escritor paraguayo Carlos Garcete, cuando éste hartaba diciéndonos que escribiría la mejor novela sobre Buenos Aires.
Gallo, mostrándole a Garcete el bolsillo chiquito del pantalón, le preguntó cómo se llamaba. Garcete se quedó mudo y el bueno de Gallo, le dijo, entre zumbón y cansado: "seguí comiendo. Este bolsillo se llama "chiquilín", se llama".
Una lección de lunfardía en una noche memorable del "Bachín" de los ´60.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue reconocido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la legislatura porteña.

30.6.10

La Generación Perdida

En mis ciclos literarios de la radio, hablé sobre la generación perdida. Tomé a Hemingway, a Fitzgerald, a Faulkner.
Si se me preguntara (como se hizo) a quién elijo de estos tres, me quedaría algo mudo para decir, luego, algo como para salir del paso. A Hemingway lo elijo como lector, para leerlo con deleite porque era un escritor visceral, auténtico, vívido. Y a Faulkner lo elijo, como escritor. Para aprender el arte de narrar, la carencia de tiempo cronológico en sus textos, el monólogo interior, eso que había aprendido de la teoría psicoanalítica de William James, que éste llamó "el fluir de la conciencia".
¿Qué puedo decir de Scott Fitzgerald? Que era un escritor tremendo al que el alcohol, las rubias, el charleston y la "blanca", agotó hasta chuparle todo el talento. Cuando fue a Hollywood de guionista, ya era una sombra y no pudo producir nada. Se agotó entre las deudas que contraía por la esquizofrenia de su mujer y su vida disipada, con aires de bacán.
!Qué historias maravillosas! !Qué vidas locas las de los tres borrachines! Y Hemingway y Faulkner con sus Premios Nobel. Y Faulkner con su Premio Pullitzer. Y Fitzgerald queriendo escribir la vida de Irving Thalberg, un promotor "groso" de cine, un magnate al estilo de los que soñaba él.
A Hemingway lo mató su propio escopetazo; a Fitzgerald su corazón a botella llena; a Faulkner, su retraimiento en ese pueblito sureño, su botella de Whisky, el no tener ya nada qué decir...
Habrán sido miembros de esa generación "perdida" que se juntaba en la casa de Gertrude Stein, en París. Pero la Literatura "ganó" a estos tipos para su lado. Para el lado de la belleza. Para que uno se sienta abrigado por las "plumas" de estos monstruos.
¿Se podrá escribir alguna vez algo como "Campamento indio", el cuento de Hemingway? ¿O "Babilonia revisitada" de Fitzgerald? ¿O "El sonido y la furia" o "Mientras yo agonizo" o "El oso" de Faulkner?
Estos tipos se transformaban frente al papel. Fitzgerald dejaba a un lado su complejo de pene corto; Hemingway se olvidaba de pelearse en alguna taberna; Faulkner dejaba que lo invadieran esos fantasmas del sur profundo y salía a contar historias increíbles, de familias numerosas, de hijos bastardos, de negros explotados.
Y nosotros, lectores, a disfrutar con estos tres alcohólicos irrecuperables, que sabían que el hígado se llenaba de cirrosis, que se caían bajo cualquier mesa, que babeaban y se orinaban en sus pantalones, que no podían fornicar...
Los Estados Unidos, a través de estos tres (y muchos, muchos más) se redime (aunque sea un poco) de los Truman, de los Errol Flynn, de los Mac Carthy, de Bush (padre e hijo) y de tantos hijos de puta que nacieron en ese suelo.
!Honor, entonces, a la Generación Perdida!

ROBERTO DIAZ
(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue distinguido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.

19.4.10

La ingenuidad de los ´60

Recuerdo que aquella entrañable generación de los años 60, iba al cine Lorraine a ver esas "plomadas" de Antonioni y Bresson, para, después, salir a discutir las imágenes, sentados a una mesa del viejo "Paulista" de Corrientes o en "El Colombiano". A Fellini le mirábamos cada escena con manía de entomólogo y Passolini, a mí, me hacía dormir a los diez minutos de empezada la película. No sé. Tenía una habilidad con los "travellings" que me hipnotizaba. Yo roncaba como loco en una butaca.
!Qué ingenuidad la de los muchachos de los 60! Analizábamos los tangos, nos gustaban "Los Beatles", admirábamos aquella gesta de los barbudos cubanos, comíamos en "Bachín" y hacíamos largas mesas con Minguito Altavista, con Javier Portales, con Julio de Grazia, con Marquitos Zucker. Nos extasiábamos escuchando a Raúl González Tuñón que nos contaba sus aventuras en el París de los surrealistas o cómo había conocido a Gardel a bordo del "Conte Rosso".
Los muchachos de los 60 fuimos soñadores, líricos, bohemios, atorrantes. Buenos tipos.
Los 70 fueron otra cosa. La muchachada sintió que tenía que ser violenta, que había que cambiar el mundo a los tiros. Impulsados (y cegados) por "ideólogos" que hicieron su agosto, se inmolaron a sangre y plomo. Los milicos desempolvaron el Manual de los asesinos de la OAS y los torturaron y masacraron...
Y no satisfechos con ese baño de luto y sangre, inventaron la "Gesta de las Malvinas" una farsa acompañada por periodistas alcahuetes, a los que les escribían el libreto del triunfo heroico cuando, en verdad, se trataba de una humillante derrota.
Esta Argentina (para los muchachos de hoy, que no la vivieron) existió. Y algunos de esos "ideólogos" viven, panchamente, en Europa o se pasaron a trabajar para la CIA.
En el camino, quedó un país fragmentado, lamiéndose las heridas, quedaron madres llorando a sus hijos desaparecidos, una justicia que no terminó de cerrar las cosas y un resentimiento en muchos corazones que no nos hace nada bien.
Transcurrió la friolera de casi cuarenta años y, aún hoy, todavía estamos recordando, con dolor y sufrimiento, aquellos años de locura.
Tengo amigos desaparecidos; yo mismo me fui un rato a España porque sentía mucho miedo. No me averguenza confesarlo. Tengo autoridad moral para hablar de todo esto. Y nadie puede arrogarse ser "campeón" de nada. Ni los que se fueron ni los que se quedaron.
Y tenemos la obligación moral, unos y otros, de cerrar definitivamente este capítulo oscuro y denigrante de nuestra historia.
Esto no se consigue tensando la cuerda, acusando con dedo admonitorio como si fuéramos los dueños de la Verdad, de la Valentía y de los Derechos Humanos.
Esto se consigue con más humildad, con más inteligencia, con GRANDEZA.
Quien no comprenda esto, es un imbécil. Y continuaremos haciéndole mucho daño al país y a las nuevas generaciones.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue reconocido "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.

27.3.10

El vaso medio lleno o medio vacío

Créanme: siempre he privilegiado la Libertad por sobre cualquier otra consideración. En general, la mayoría prefiere la panza llena aunque pierda todos sus derechos como persona. El pueblo alemán en épocas de Hitler comía bien; entonces, ¿a quién le importaba, salvo al damnificado, que fueran a parar millones de personas a los campos de exterminio? !Ah, mundo perverso, mondo cane (con perdón del cane)!
Siempre me pareció que ser oficialista era un oficio muy triste; había que aceptar los excesos del Poder, estar siempre de acuerdo, buscar eufemismos para soportar las mentiras del Poder, justificar las aberraciones del Poder y aplaudir, aunque no se tuviese ganas, las alcahueterías a las que obliga el Poder.
Para un oficialista, el vaso estará siempre lleno; para un hombre libre, siempre estará vacío.
Porque el hombre moral, el hombre ético, busca lo imposible. Busca la perfección, busca la Belleza, busca la Justicia, busca la Paz. Palabras todas de difícil alcance, sobre todo en una Humanidad imperfecta, que acumula tantos arribistas, tantos hipócritas, tantos canallitas que se venden por menos de treinta monedas.
La Argentina ha tenido etapas sombrías en cuanto a la libertad de expresión. Mi amigo Teodoro Kantor quedó con problemas neurológicos casi toda su vida, simplemente porque, a los quince años, lo encontraron vendiendo el periódico de la juventud comunista. Eran años del primer Perón, con la Sección Especial trabajando a pleno.
Y hubo matanzas !quién lo duda! cuando los esbirros de uno u otro lado asesinaron sin piedad, allanaron viviendas, robaron y saquearon, torturaron y mataron. El tristemente célebre "Terrorismo de Estado" o "Triple A" o las tristemente célebres "Organizaciones Armadas", que creían podían utilizar "al General" y "el General" los utilizó a ellos...
Ahora mismo, en un afiche oficialista, hablan de "país real" y "país virtual". Se lanzan, como lobos, contra los medios de comunicación. !Qué estupidez! !Quieren matar al cartero cuando la carta envenenada la mandó otro!
En su desesperación, estos soberbios (que, además, aplauden a cuanto tiranuelo ande suelto por ahí)quieren tapar la realidad con un harnero. Como si la inflación, los índices del INDEC del señor Moreno, los asesinatos absurdos para sacarte el auto o las zapatillas, fueran "virtuales".
Por eso, hablo del "vaso medio lleno" o "el vaso medio vacío". Porque, como periodista que he sido (y soy) prefiero la libertad irrestricta, prefiero hasta la exageración de la noticia antes que la supresión de la noticia.
Ocultar la realidad es obra de mediocres y canallas. Mentir al pueblo es un crimen de lesa humanidad que, alguna vez, se tendrá que pagar con la cárcel.
Cuando los medios de comunicación ignoran algo es porque, desde el Poder, le dan la orden. Recuerdo cuando llamaba el Intendente a la redacción para "apretar" por tal o cual noticia. Al Poder nunca le gusta el periodismo. Preferirían que no existiera, que se llamara a silencio. Así, es más fácil gobernar. Y te hacen creer que vivís en el mejor de los mundos cuando vos tenés conciencia que estás en medio del infierno.
Por eso, digo que es triste ser oficialista. Y oficialista gratis, mucho peor.
El escritor, alguna vez ha sido definido como "la mala conciencia de la época"; el periodista debe ser aquello que dijo, alguna vez, Sócrates y que sirvió para que el diario de Bottana lo llevara como emblema. Aquello del tábano sobre el noble caballo.
¿Que hay malos periodistas? !Quién lo duda! ¿Que hay periodistas que se venden? !Quién lo duda! ¿Que hay dueños de diarios que son infames? !Quién lo duda!
Pero, a pesar de todo esto, lo prefiero a los malos gobernantes, a los que hacen sus negocios privados, a los que le mienten a la población, a los arrogantes que se creen los "salvadores de la patria" y a los que vienen a hablar en nombre de los pobres y terminan fabricando más pobres...
¿O las familias que duermen en la calle, a una cuadra del Obelisco y en la avda. Corrientes, son "virtuales"? ¿O los índices de inflación que padece la gente son "virtuales"? ¿O los pueblos aborígenes a los que les quitan la tierra para sembrar soja, son "virtuales"? ¿O el "enriquecimiento ilícito"?
Hace más de sesenta años que cantamos la "Marchita" y así nos ha ido...

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007, fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.

22.3.10

Una propuesta

En estos días de tanta confusión, de tanta violencia verbal y tanta estúpida soberbia, anda dando vueltas por allí una propuesta para que los jueces accedan al cargo por concurso, es decir tomarles un examen para ver si no andan en calzones por cualquier burdel, si han leído el Código Civil o el Penal, si no se la pasan "transando" con las "asociaciones ilícitas" y si son, realmente, personas decentes e independientes de todo poder espúreo. !Bravo!
Estas cosas ocurren cuando, en este caso, la justicia empieza a rebelarse un poquito nomás y ya no dice todo que sí y no funcionan, como deberían funcionar, aquellas célebres "servilletitas" de papel de la época del calvo ministro de economía, que nos dejó con el tuje para arriba, con aquel nunca bien ponderado (o maldecido) "corralito".
Pero mi propuesta va mucho más allá, si ustedes me lo permiten. ¿Por qué no extender esos exámenes a todo el país? ¿Por qué no pedir un examen para ser diputado, senador, ministro, presidente de la República? ¿Si pedimos examen para tomar una vendedora de tienda, por qué no existe la misma exigencia para aquellos que deben guiarnos y decidir nuestro destino?
Hay gente que, luego de acceder al sillón de Rivadavia, se "desayunó" de un montón de cuestiones. Es decir, hizo el aprendizaje cuando ya estaba en el cargo.
Creo que a la Argentina le iría mucho mejor. Yo mismo, para ser socio de SADAIC, tuve que hacer, en su momento, un examen de autor. Y recuerdo cómo Homero Expósito sacó zumbando del examen a un tipo que no tenía idea de cómo se hacía una sextina.
!Cuántas sorpresas nos llevaríamos! Porque no es posible que una fortuna, un acomodo, ser amiguito de tal o de cual, lleven a acceder a cargos tan importantes...
Una de las cosas que les pediría a los funcionarios es un mínimo de diez libros leídos...
Y no estaríamos frente "a una minoría ilustrada" como suponen ciertos trasnochados que, además, les conviene que todo siga en esta ignorancia.
Por el contrario, tendríamos a los mejores en los lugares que se merecen.
Y terminaríamos, en gran parte, con esta mediocridad que nos acompaña, con estos tipos que en vez de pensar con la cabeza, piensan con otras zonas del cuerpo que, en realidad, sirven más para sentarse o hacer cagadas que para llevar adelante un país.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.

28.2.10

José Pedroni, el poeta luminoso

La otra tarde, me encendí cuando, en el programa de radio Splendid para el que trabajo, leí un fragmento de "Maternidad" de José Pedroni.
Y recordé a este gran poeta, que trabajó 35 años consecutivos como tenedor de libros en una empresa de Esperanza, Santa Fe, que se casó a los 19 años y tuvo 4 hijos con su esposa, Elena Chautemps, a la que había conocido en el trabajo.
!Caramba! !Qué vida silenciosa y recatada la de José Pedroni! Por eso dijo, alguna vez: "porque soy contador / y de vulgares modos /y visto simplemente / y si miro a una estrella o a una flor / la miro como todos.../los versos no son de él, dice la gente..."
¿No sería imprescindible que se lo leyera todos los días en las escuelas, que los alumnos apresaran la belleza y la ternura que hay en este poeta sin par?
Siempre cuento la anécdota de aquella vez en que NO CONOCI a José Pedroni.
Resulta que un amigo, de esos incondicionales, quería que mi poesía juvenil fuera conocida por el poeta de Esperanza. Como tenía un hermano abogado en la ciudad de Santa Fe, que conocía a Pedroni, hacia allá rumbeamos un fin de semana. El objetivo: visitar a don José en su casa de Esperanza para que éste me conociera y opinara sobre mis versos.
En Santa Fe, paramos en la casa del hermano de mi amigo y el domingo, luego de un asado y de una siesta (que llevó a cabo el anfitrión) sacó su viejo Ford T del garaje, dispuesto a ponernos en camino a Esperanza.
Pero el auto no arrancó, a pesar de las decenas de golpe de manivela que le dio el hermano de mi amigo. Resultado:el hombre, con su mejor parsimonia provinciana, dijo: "!qué vamos a hacer!" y guardó, otra vez, el Ford T en el garaje.
NUNCA CONOCI a José Pedroni. Pero lo admiré siempre y lo consideré, siempre, uno de los más grandes poetas argentinos, injustamente olvidados en estos tiempos tan vulgares donde se exhiben "nenes de papá" con olor a chocolate y esperpentos que usan para distraer al "soberano".
Los poetas están "desaparecidos" pero siempre en acción, porque la POESIA no morirá mientras haya algunos que siguen construyéndola.

ROBERTO DIAZ
(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En 2007, fue distinguido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña)

19.2.10

El "Policial Negro"

La diferencia entre la novela policial de origen inglés y el denominado "Policial Negro" consiste en que los ingleses tomaron el texto policial como si fuera un "puzzle", un entretenimiento intelectual para gente pensante, pero ociosa. Por eso, sus enigmas se desarrollan en recintos cerrados (palacios, castillos, islas, escuelas, etc) y el asesino es tan inteligente como el investigador, generalmente un intelectual, un dilettante. La frialdad (y hasta el absurdo) de dejar los muertos en habitaciones cerradas mientras sigue la vida normal, el té de las cuatro, etc.es una constante en textos de Agatha Christie ("Eran diez indiecitos") o Patricia Wentworth ("La daga de marfil").
En cambio, en el "Policial Negro" un invento de autores norteamericanos, la vida adquiere protagonismo, saca a relucir su violencia, sus pasiones más bajas. En la novela policial norteamericana, hay gangsters, mujeres fatales, tipos perdedores, oportunistas de toda laya, traidores y mucha, pero mucha sangre.
Los yanquis hicieron una industria de estos textos, los llevaron al cine, ganaron multitud de dólares con ellos y hace más de un siglo que explotan esta veta literaria.
Todo empezó con la revista "Black Mask" (Máscara Negra) que se vendía en los kioscos. Allí escribió sus primeros cuentos Dashiell Hammett (el que, luego, escribiría "El halcón maltés", "Cosecha roja", "La llave de cristal); y también James Cain con su "El cartero llama dos veces" y "Pacto de sangre". Este escritor quería ser cantante de ópera y escribió "Serenata", una de sus mejores creaciones.
En la década del ´40, aparece un tardío Raymond Chandler con un detective privado que hace escuela: me refiero a Philip Marlowe, que impacta con sus frases desencantadas, con esa nostalgia que lo invade cada vez que se enfrenta a una causa perdida. Un maestro en el diseño de su personaje, su obra es llevada al cine por Humphrey Bogart, primero y, luego, por un Robert Mitchum que, creo, dio con el personaje. Chandler, alcohólico, depresivo, trabajó como guionista de Hollywood, aunque no le gustaba.
Es muy bueno Jim Thompson (su "1280 almas" es magnífica); James Hadley Chase, siempre entretenido, siempre "Maestro del suspenso". O William Irish con su "La ventana indiscreta" a la que Hitchcock le supo sacar tanto jugo. O la inglesa Patricia Highsmith, con su saga de Ripley; o el negro Chester Himes con sus detectives de Harlem: "Sepultura" y "Ataúd". O Charles Williams o James Ellroy o Ross Macdonald o el otro Maestro: James Mac. Donald o Vera Caspary con su "Laura" (el poeta francés Louis Aragon la consideró "la mejor escritora de su generación")y el francés Boris Vian y el español Manuel Vázquez Montalbán y el italiano Andrea Camilleri y Horace Mc. Coy con "¿Acaso no matan a los caballos?" y más y más autores que se dedicaron a criticar a la sociedad, a describir la hipocresía reinante, a sacar a la luz la violencia enquistada en sus calles, a denunciar la corrupción policial y a esos políticos tramoyeros. En fin, esta literatura es de denuncia, es testimonial y, además, entretiene.
Para terminar, una frase de Chandler, en boca de Marlowe: "usaba una cantidad de maquillaje suficiente para pìntar un barco".

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue reconocido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.

6.2.10

Homenaje al Policial argentino

Ustedes saben que el primer texto policial entre nosotros, lo escribió Eduardo Ladislao Holmberg con "La bolsa de huesos". Esto fue en 1895. Holmberg es el mismo que fue director del Jardín Zoológico, un naturalista de fuste, con varios libros sobre esta materia e incursionó en la literatura con obras de ciencia-ficción (también fue pionero en esto) y con este relato policial.
De allí en más, muchos escritores escribieron "Policiales".
Pero en 1948, Jorge Luis Borges y Adolfo Bioy Casares fundan la colección "El séptimo círculo" de la editorial Emecé; el número uno fue "La bestia debe morir" de Nicholas Blake, seudónimo del gran poeta irlandés Cecil Day Lewis (el padre del actor Daniel Day Lewis, el de "Mi pie izquierdo"). Muchos escritores argentinos publicaron en esta colección, utilizando algunos de ellos seudónimos.
También apareció la editorial Hachette, con su colección "Naranja". Allí, Rodolfo Walsh (gran traductor) publicó "Variaciones en rojo" y una antología de cuentos policiales de variados autores nacionales.
Pero en 1951, aparecería la editorial ACME con su colección "Rastros". Me caminaba varias cuadras, cuando era pibe, hasta un quioso donde la cambiaban: "dos x uno".
Me las leí todas. En esa colección, había muchos escritores argentinos escudados bajo seudónimos. Allí publicó Alfredo Grassi (con un seudónimo W. Seymour), Isaac Aisemberg ("Manchas en el río Bermejo") Wilfredo Talamona, periodista de "Crítica", con "El crimen del lago de Palermo", Eugenio Zapietro (seudónimo Ray Collins)Luis de la Puente (con una novela formidable: "La Rivadavia Azul")y José Batiller (su "La pista de los zapatos viejos" la vi en un portal alemán a !29 euros el ejemplar!). Fue editada en 1952.
En el año 2007, los sobrevivientes de esta editorial (sus dueños eran Amadeo Bois y Modesto Ederra) se reunieron en un boliche de Boedo a recordar viejos tiempos. Son personas que rondan los 90 años, entre ellas "el alma mater" que fue Vera Lapegna, una italiana que llegó a los cinco años a nuestro país, que fue primero secretaria de la editorial y, luego, se convirtió en la directora editorial. Dicen que, a veces, les pagaba a los autores de su propio bolsillo. "Muchos tenían familia y la editorial, a veces, se demoraba en los pagos" -dijo la buena de Vera.
Pasó mucha agua bajo los puentes y el policial dejó de ser mala palabra para convertirse en un género literario respetado.
Por eso, se siguió escribiendo y en la actualidad Juan Sasturain, Sergio Sinay, Juan Martini, José Pablo Feinman y otros lo siguen cultivando.
Precisamente, en estos momentos, una novela policial de Eduardo Sacheri: "La pregunta de sus ojos" está compitiendo por el Oscar a la mejor película extranjera. El filme de Campanella se llamó "El secreto de sus ojos" y es un excelente texto que merece el galardón.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el 2007, fue reconocido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" POR LA LEGISLATURA PORTEÑA.

18.1.10

Ciclo Literario

Ultimamente, estoy hecho un "hombre de radio". Primero, fue mi amigo Juan Carlos Apicella que me invitó a hablar sobre tango y de "bueyes perdidos" en su programa radial. Y allí lo vengo haciendo los domingos, tipo 11 horas, cuando me llaman por teléfono de la AM 1480 y chamuyo de lo que venga. El bueno de Api me deja hacer y yo hago...sanateo de lo lindo y los ñatos del otro lado del éter se prenden...
Los otros días se me ocurrió decir que me habían recomendado cloruro de magnesio para esta rodilla derecha que me tiene a mal traer, y empezaron a llover los mensajes. Me decían que lo tomara, que era bárbaro...hasta hubo un tipo que contó que su suegra lo había tomado y, ahora, caminaba fenómeno..."Ya viene todos los días hasta mi casa a romperme las pelotas..." -me dijo el sufrido yerno. Me hizo reír mucho.
Y, ahora, esta propuesta generosa de Eduardo Marino que, a propósito de mi Blog, me llamó desde el sur, donde estaba veraneando, y me ofreció un espacio en su programa "Rincón Porteño" para chamuyar sobre Literatura.
Va por Splendid (AM 990) los sábados de 14 a 20. Hay otros muchachos que saben un montón en lo suyo y, cada uno, habla sobre la disciplina que domina y se producen charlas muy lindas y vienen invitados polentas como la encantadora Virginia Lago que el sábado pasado habló sobre el espectáculo teatral en que está trabajando: "Las chicas del calendario".
Para los que desconocen el tema, esta obra está basada en un hecho real: en un pueblito del norte de Inglaterra, unas mujeres ya veteranas decidieron hacer un almanaque en la que salían desnudas. El objetivo: recaudar fondos para luchar contra la leucemia. Fue un éxito comercial y un impacto esas señoras desnudándose para un fin benéfico.
Luego, se produjo la película y, ahora, la obra teatral que está recorriendo el mundo. Estas actrices nuestras (Virginia Lago, Linda Peretz, María Rosa Fugazot, María Valenzuela, Norma Pons, Dora Baret, Rita Terranova) la están representando en el teatro Metropolitan (Corrientes al 1400) y le prometí a Virginia ir a verla.
Ojalá tengan el éxito que se merecen estas señoras actrices de nuestro teatro.
Bueno, como ven, me embarqué en otro laburo y van...
El sábado pasado, hablé sobre Arlt; el que viene, hablaré sobre Borges.
Espero que los oyentes lo acepten; no sea cosa que se empiecen a rajar cuando me escuchan y el pobre Marino se quede sin audiencia.

ROBERTO DIAZ
(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007, fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES, POR LA LEGISLATURA PORTEÑA)

11.1.10

Chesterton

Gilbert Keith Chesterton, fue un escritor inglés, que vivió a caballo del siglo XIX y XX. Los lectores lo conocen mucho por su saga del Padre Brown, personaje eclesiástico puesto a detective, que resuelve casos criminales a la manera de Sherlock Holmes, el célebre investigador creado por Sir Arthur Conan Doyle.
Chesterton era muy gordo; tanto es así, que Jorge Luis Borges (que lo admiró) dice que, cuando se levantaba en el omnibus para darle el asiento a una dama, en realidad daba dos asientos.
Andrómeda, la editorial para la cual trabajo, me pidió la traducción de estos libros de cuentos sobre el Padre Brown.
Debemos decir que los derechos de autor de Chesterton, han caducado porque este escritor que fue poeta, cuentista, novelista y ensayista, falleció en 1936, es decir hace más de setenta años. Por lo tanto, es un escritor apetecible para reeditar porque ya no es necesario pagar sus derechos.
Algunos no opinan bien de Chesterton; dicen que fue racista y discriminador, sobre todo con los judíos, en algunos de sus textos. Lo que, sí, me atrevo a decir es que su catolicismo practicante, siempre está latente, sobre todo en estos casos donde interviene el Padre Brown, un curita humilde, tímido, que tiene una mente sagaz y resuelve los misterios que se le presentan.
Algunos de estos argumentos están bien logrados. Es una lectura que entretiene aunque puede volverse monótona porque la mecánica de su escritura se repite.
Pero hoy quiero hablarles de uno de estos cuentos titulado "El signo de la espada rota" (puede tener algún otro título que se le asemeje) porque me parece que su trama es, realmente, inteligente.
Chesterton parte de un viejo axioma popular, que dice: "si quieres ocultar una hoja, fabrícale un bosque a su alrededor" o "si quieres ocultar un grano de arena, construye una playa" y así por el estilo.
En este relato, hay un General angloindio llamado St. Clare y un líder popular brasileño llamado Olivier. El General es un personaje con una trayectoria militar ejemplar; sin embargo, ataca imprudentemente a las líneas brasileñas, y produce una derrota sin atenuantes. Lo raro del caso es que este General, cuyos atributos militares son intachables, haya llevado a su tropa a semejante acto absurdo. Y lo raro del brasileño, es que siendo considerado como un hombre generoso y magnánimo, enemigo de verter sangre, haya tomado la resolución de colgar al General, luego de terminada la batalla. Cabe consignar que St. Clare fue el único enemigo que colgó el brasileño de un árbol, ya que a los otros soldados les dio la libertad.
Con estas contradicciones y estos curiosos actos, que contrastan con el modo de actuar de estos dos personajes, Chesterton construye el enigma y fabrica una tragedia que tiene mucho de original y sosprendente.
Por razones obvias, no contaré el final del cuento, pero recomiendo leerlo. Está editado en "La Inocencia del Padre Brown" un libro que reúne doce textos sobre este cura inventado por Chesterton. Este cuento me pareció superlativo, pero hay otros que están en una misma línea de excelencia.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007, fue reconocido como "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.)

4.1.10

!Fue el mayordomo...Fue...!

En esta Babel que es la Literatura, yo me metí, una vez, en esa Torre y no salí más. Quiero decir, sin metáfora mediante, que tengo varias bibliotecas en el lomo.
He leído de todo, en un esfuerzo desmedido por vencer al pibe de barrio, de familia laburante, y sacar patente de tipo culto. Con los años, me di cuenta que esto tiene una importancia relativa. Lo principal, lo medular, es que esos libros hayan servido para darte un poco de civilización, un poco de sapiencia, un poco de astucia, un poco de comprensión para andar por esta "selva endemoniada".
Todo escritor es un compulsivo lector; de no ser así, no es nadie.
La Literatura tiene un montón de géneros, de estilos, de formas, de técnicas. Recuerdo que, durante mucho tiempo, los tilingos de siempre decían que la literatura policial era "un subgénero". !Carajo! -decía yo. Un subgénero que dio escritores como Poe, Dickens, Chejov, Conan Doyle, Chesterton, etc. !Qué raro subgénero!
Después, me di cuenta que los tilingos son unos "giles" que repiten, como loros. Y pueden cambiar de opinión como se cambia un calzoncillo cagado...
Creo, sin alarde de otario, que me leí todas las novelas policiales habidas y por haber. Algunas son deleznables, escritas por individuos mediocres. Pura hojarasca.
Entre nosotros, hubo algunos impresentables...Pero novela policial escribió Marco Denevi, mi querido amigo Marco, un escritor notable. "Rosaura a las diez" podría figurar entre los mejores textos del género. Como el de este Eduardo Sachero que escribió: "La pregunta de sus ojos" y logró una trama formidable, que cierra por todos lados.
Entre los extranjeros, puedo extasiarme con un título de John Dickson Carr, con la maestría para el suspenso de William Irish, con ese compendio de literatura que es Georges Simenon, con ese "caza gañote" que utiliza, con una habilidad sorprendente, Hadley Chase.
El género policial exige raciocinio, exige lógica. Pero, de pronto, aparece Michael Burt y escribe "El caso de las trompetas celestiales" con un final fantástico; y lo mismo hace Eden Philpotts (poeta, por otra parte, reconocido) en "El cuarto gris", dos novelas que escapan al dogma del género. O ese monstruo de Patrick Suskind con "El Perfume"...
Y aquí viene lo que quería decir. Hay un código de hierro en la literatura policial, que dice: "el mayordomo nunca puede ser el asesino". Cuando decimos mayordomo, decimos todo "personal de servicio". Los ingleses, tan flemáticos ellos, nunca se quisieron mezclar con la servidumbre: que el bolonqui quede entre ellos...
Sin embargo (y si hay más títulos, por favor, háganmelo saber) hubo una escritora inglesa que rompió el código. Me refiero a Patricia Wentworth que en "La daga de marfil" señala como el asesino al mayordomo Marham.
Creo que es una "chorrada" -como dicen los españoles-. Una decepción tremenda. Un "desconsuelo brutal". Porque cuando estamos esperando que algunos de esos burgueses estirados vaya a la horca, resulta que esta mina se inclina por el mayordomo. Pero el absurdo está en que la esposa del mayordomo, que es la cocinera en esa mansión, sigue haciendo unos soufflés de rechupete y un pastel de naranja !con mandarinas! mientras a su marido se lo llevan a la cárcel por haber asesinado a su amo con esa célebre "daga de marfil".
Cuento el final porque esta novela de la Wentworth no merece leerse ni perder el tiempo en esa vorágine de horarios, donde entró uno, salió otro y el fiambre pide a los gritos que no lo jodan más. Porque, para que le cerrara la trama, ese despacho donde se consumó el crimen parecía la estación Constitución a las seis de la tarde.
!Fue el mayordomo...Fue...! Una turrada de la inglesa acusando al proletariado de tan infame hecho de sangre.

ROBERTO DIAZ

(Escritor, poeta, periodista, traductor de habla inglesa, autor de canciones, con premios nacionales e internacionales. En el año 2007 fue declarado "PERSONALIDAD DESTACADA DE LA CULTURA DE LA CIUDAD AUTONOMA DE BUENOS AIRES" por la Legislatura porteña.